Una geometría sencilla ordena una serie de franjas de edificación y de espacios libres que ponen en relación la parte llana del acceso y  la autovía con la parte alta de las laderas y espacios naturales de reserva.

Las franjas de espacio libre se estructuran en tres categorías. En la zona cercana a la autovía se proponen usos como:

• Parque lineal de borde y protección acústica.
• Espacios Deportivos.
• Reservas de arbolado existentes.
• Zonas de recogida de aguas y lagos para su almacenamiento.

En la parte central de cada una de las franjas de espacio libre se proponen los siguientes usos:

• Parques de plantación de especies autóctonas, árboles, matorrales y setos autóctonos de bajo mantenimiento con espacios de paseo y zonas de estancia.
• Huertas urbanas de propiedad pública y explotación privada

En la parte final de las franjas y en contacto con las laderas se ha proyectado un parque deportivo, campo de golf que se adapta a la forma sinuosa del paisaje. Con recorridos peatonales y miradores localizados que permitan a los visitantes pasear como si en un parque se encontraran.

Las franjas de edificación también se estructuran en diferentes usos, favoreciendo la mezcla vivienda – trabajo – ocio. En la parte baja, en contacto con la autovía se plantean Dotaciones Polivalentes, y espacio para una universidad privada y un parque tecnológico, usos demandados en la zona.

La edificación residencial es de menor densidad cuanto más cerca está de las laderas, mezclando tipos residenciales nuevos, viviendas asistidas para mayores, viviendas preparadas para el teletrabajo, bloques comunitarios con diferente grado de autonomía y de servicios comunes compartidos.